Perdonad por lo extremo del título, pero es que estoy muy desconcertado por Miley Cyrus (ex Hannah Montana), Hillary Duff (ex Lizzie McGuire) y en general esta cantidad de artistas teenager que nos inundan, que quieren romper con su imagen ñoña que Disney les bien-impuso un día a golpe de talón.
Miley Ray Cyrus en el backstage de los MuchMusic Awards 2010
(imagen de Wikimedia Commons)
Primero no olvidemos que a Miley la apadrinó musicalmente Dolly Parton, la de las pechugas country con parque de atracciones propio, y ya eso es sinónimo de casi bendición bíblica. Que la que cantó «9 to 5» sea tu padrina (porque ella une los dos sexos, ya que tiene pinta un poco de travestí) ya significa que en la vida algo bueno te espera.
Y de repente, la muchachita que en la serie discutía con su padre rollo «papá soy adolescente y tengo problemas porque tengo un lado de mi personalidad que es una estrella del pop y otra que es una insulsa de instituto, y eso hace que el periodo se me retrase» saca «Can’t Be Tamed«, un éxito enorme, con un videoclip más enorme aún con la que la cachorrita de Disney pasó a ser una perra con mayúsculas.
Pero es que hoy he escuchado por primera vez «Who Owns My Heart» (quien posee mi corazón) y me he quedado aterrado en el asiento, porque:
- me reí de la serie,
- me reí de ella,
- y ella ahora con esa canción a venido a darme una bofetada a mano limpia de las que escuecen, a mano abierta, y no me ha orinado encima (metafóricamente) porque ella es una dama, porque ya era bastante el escozor que tenía.
Así que ya los quiero ver a ustedes escuchando como si estuvieran poseidos por el espíritu de Gaga Resucitada la canción «who owns my heart«, y antes de hacerlo, despojense de prejuicios hacia su anterior vida como H. Montana y piensen ¿no estamos ante uno de los temazos disco del año? Yo creo que si.
Ahora el vídeo, disfrútenlo.
Miley Cyrus – Who owns my heart
SOFISTICADA CRUELDAD 